miércoles, 20 de marzo de 2013

EL DOLOR

JUSTICIA DE LAS AFLICCIONES


En el fondo, el dolor no es más que una ley de equilibrio y educación. Las faltas del pasado recaen sobre nosotros con todo su peso y determinan las condiciones de nuestro destino.

El sufrimiento es el contragolpe de las violaciones cometidas contra el orden eterno, que todos hemos transgredido, por lo tanto debe considerarse como una necesidad de orden general, como una condición de progreso.




Es muy difícil aceptar que el sufrimiento es bueno; no existe ascensión sin esfuerzo. La tendencia general consiste en encerrarse en un estrecho circulo de individualismo y así nos empequeñecemos. Reducimos todo lo que es grande en nosotros y esta destinado a crecer, a extenderse, a dilatarse o a tomar vuelo, esto es, el pensamiento, la conciencia, el alma. Por lo tanto, los goces, los placeres, la estéril ociosidad no hacen mas que volver más pequeña nuestra vida y nuestro corazón.
Para romper este circulo, para sacar nuestras virtudes al exterior es preciso el dolor. La tristeza y el sufrimiento, nos hacen ver, oír y sentir cosas que normalmente no se perciben.
El dolor es un medio para atraernos al bien, él nos corrige.
¿Se puede evitar? ¿Buscamos evitarlo?
Entendemos que se puede atenuar y evitar en parte, teniendo en cuenta primero la relación entre conocimiento y responsabilidad; segundo, que la ley Natural o Divina tiene un margen de tolerancia y fuera de él, la Ley actúa en una acción directa y proporcional a la trasgresión; y tercero, el libre albitrio del hombre le permite siempre compensar o atenuar esta acción restauradora, mediante su apertura y disposición consciente.
Sobre la base de estos tres puntos el ser puede atenuar o evitar en parte.
Si esto no sucediera y el dolor llegara a nuestras vidas, acusaríamos recibo por:
  1. NEGLIGENCIAS E IMPRESICIONES
  2. ERRORES, CONCECUENCIAS DE NUESTROS ACTOS
  3. PRUEBAS O EXPIACIONES (DE VIDAS PASADAS)
LA EXPIACION PUEDE SER UNA PRUEBA, PERO LA PRUEBA NO ES UNA EXPIACION.
Huimos y le tememos naturalmente al dolor, enfocado así, lo aceptamos más, le perdemos miedo, es que nuestras ignorancias, nuestras vidas pasadas y la carga instintiva nos ha hecho evitarlo y temerle siempre, esto nos lleva a plantearnos nuestra aceptación, nuestra FE.
Si el dolor hace a la evolución, ésta anula progresivamente el dolor, demostrando que la justicia y bondad de la ley, (no es ley de mal y de dolor), es ley de bien y de felicidad.
Hace falta concebir el dolor no como un mal debido al azar, sino como una forma de justicia, como una función de equilibrio, que enseña al hombre aún respetando su libertad, las verdaderas vías de la vida, y lo obliga después de tentativas y errores, a marchar por el único camino posible, el de su propio progreso.
No se roba, no se escapa, en el tiempo a la ley, rebelarse es producir un mayor choque de retorno en la elasticidad de la ley.
La anulación del dolor se opera valerosamente a través del dolor, naturalmente le tememos, le escapamos instintivamente y cuando lo sufrimos nos rebelamos, nos desconformamos y nos abatimos, debemos abandonar la utopía de pretender conquistar todas las felicidades.
Existen tantas formas de dolor y este es tanto más grave cuento más abajo se encuentra el ser, la medida del dolor cambia conforme al grado de evolución, se evapora en el proceso de la espiritualización progresiva.
Decimos que las aflicciones obligaban al espíritu a replegarse en si, prepara el camino a las ondas introspecciones, despierta y desarrolla sus cualidades hasta entonces latentes y multiplica todas sus potencias.

Mencionamos que las aflicciones son justas que existe justicia en ellas, sin embargo analicemos la reacción humana, podríamos hasta expresar “dime como sufres y te diré quien eres”, esta reacción humana:
  1. Rebeldía
  2. Disconformidad
  3. Dolor Moral
1)- Es el enojo, nos sentimos agraviados, algo nuevo invadió nuestra calma, nos altera nuestro orden, nuestra rutina, es nuestra intolerancia ante algo que nos disgusta, es decir, es una falta de aceptación activa, de esta forma genera salida.
2)- es la reacción de bloqueo, de encerrarnos, es decir es una falta de aceptación pasiva. Llegamos a la apatía.
3)- Es cuando creemos ser víctimas de los hechos, de las situaciones o de las personas que originaron la aflicción.
Cualquiera de ellas lleva implícito un sentimiento de falta de aceptación en nuestros sentimientos. Lo creemos injusto, estamos convencidos en el fondo no merecerlo, maldecimos y renegamos, mejor es rogar y comprender, estas dos actitudes son un acto de humildad y establece una diferencia, es decir un estado de apertura.
Solo cesara el dolor cuando hayamos aprendido la lección, aquí entra el concepto de la divina providencia penetrada de equilibrio, esta sujeta al mérito, compensando al que cae si ha merecido subir y aplastando al que sube si ha merecido caer, es un principio de orden, una fuerza de nivelación. Esta ley que representa a la justicia, protege al humilde, indefenso y honesto, da al que merece y le quita a aquel que se abusa, premia y castiga mas allá de la concepción humana.
Pero el sentimiento humano se comporta como si el hombre se hallara solo, aislado en el espacio y en el tiempo, la ignorancia de la inmensa ley que todo lo rige le permite creer que vive en un caos de tendencias, desordenadas, abandonado a sus fuerzas, que es su egoísmo la única ayuda; Podemos decir entonces: LA JUSTICIA DE LAS AFLICCIONES
Podemos preguntarnos entonces ¿Es justo el dolor?
Contestamos. Es Justo
¿Es Justo nuestro dolor?
Contestamos. Es Justo
Preguntémonos sí Sentimos Justo Nuestro Dolor.
Intentemos llevar esta teoría la realidad diaria de nuestra vida, evaluemos el conocimiento, nuestras pruebas y reacción ante ellas, y preguntémonos si sentimos verdaderamente justas a ellas, entiendo que en nuestro nivel debemos tomar tres cuestiones de referencia fiel para evaluarlo ellas son: 
 
1)- ¿ROGAMOS A DIOS?
2)- ¿INTENTAMOS COMPRENDERLAS?
3)- ¿TENEMOS UNA ACTITUD ACTIVA?
A nuestro entender estas tres referencias dan el nivel que deberíamos aspirar, no menciono la actitud de plena asimilación, decimos que la simulación del dolor en nuestro nivel transcurre por intentar conscientemente estas tres cuestiones.
Debemos poner en claro dos situaciones de la vida: 
1)- situación normal y 
2)- situación de crisis
La primera va a esgrimir la teoría referencialmente sin resistencias internas, siendo capaces de deducir, de definir y de admirar los progresos (netamente intelectual), en la segunda hay dos caminos, o nos rebelamos, desconformamos y nos creernos víctimas o rogar a Dios, intentamos comprenderlas, intentar actitud activa.
Esto representa la humildad, la evolución consciente y esta anula como hoy dijimos progresivamente el dolor.
Esta humildad representa el deseo, la apertura y la voluntad para tomar con el pensamiento de la capacidad intelectual el bien que conocemos y reconocernos en nuestra realidad, ante nuestras tendencias, si somos capaces de manejarnos conscientemente en la crisis.
Prueba, expiación, imprevisiones, negligencias, descuidos, todos tenemos hoy en nuestras vidas una aflicción, sea nuestro compromiso espiritual, nuestra esposa, esposo, nuestros hijos, nuestra salud, nuestra situación económica, nuestro trabajo, nuestras desafinidades, etcétera.
Cuando Cristo decía “Bienaventurados los que lloran, porque de ellos es el reino de los cielos”, no se refería a los que sufren en general, pues todos los que se hallan en la tierra sufren se sientan en un aromo o duermen en una pocilga. Pero, desdichadamente, pocos son los que bien sufren. Pocos comprenden que solo las pruebas que se soportan bien son las que pueden conducirnos al reino de Dios. El desaliento es una falta: Dios os rehusa consuelos porque acrecéis de valor. La oración en cambio, constituye un sorteen para el alma, pero no resulta suficiente. Precisa que este apoyada en una fe viva en la bondad de Dios, con frecuencia se nos ha dicho que no impone El a hombres débiles un fardo pesado, el fardo será proporcional a las fuerzas, así como la recompensa estará proporcionada a la resignación y el valor.

Artículo extraido de la página de nuestros amigos de la Fundación de Estudios y Difusión Espírita:  http://estudioydifusionespirita.blogspot.com.ar

AMOR FRATERNAL

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